Amada mia

Finalizaba la tarde y con el crepúsculo
se dio lugar a una hermosa noche,
la cual cubria cada rincón con la oscuridad.
La luna se abrió paso entre las nubes,
asesinando el sol y adueñándose del cielo
que permanecería en tinieblas.
Una tenue luz en medio de la oscuridad,
iluminando un corazón que solo a la luna pertenece,
un corazón que late con su resplandor
y se alimenta de su inmaculado amor.

Tu eres la Luna que desgarro mi corazón y lo hizo eternamente suyo.

Te amo

sábado, 24 de octubre de 2009

Soledad


Las gotas de lluvia resuenan,
al caer sobre la tranquilidad de mi alma,
como las agujas de un reloj
que cada segundo se clavan en mi corazón.

Las sagradas estrellas desaparecen
al hacerse invisibles frente a la luz de la luna
que cubre con su velo de claridad
la noche que en esta soledad me acompaña.

Tanta oscuridad para ser vista
por mis ojos ciegos de silencio,
mas tenebrosa y triste al menguar el cielo
que se posa frente a la ventana de una ilusión.

El tiempo apacigua mis años,
mas lentos y tímidos con los encantos
de una tormenta que no cesa
de respirar agua sobre mi musa.

Soledad perfecta exclaman mis palabras,
me ilustra llenándome de carcajadas
producidas por mis lagrimas calladas
y emociones que de mi son arrebatadas.

¿En que momento mi amor voló?
si en mis manos veo las alas
que por el dolor de la tierra perdió;
Soledad fue lo único que me entrego.

Una habitación sin espejos me encerró,
tan cruel es el lecho donde me ató...
la profunda sonrisa en mi rostro
en los labios de ella se extravió.

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