Recuerdo viejas pesadillas,
Miedos vencidos y antiguas mentiras;
Me ahogo en sueños oscuros,
Soy parte de las noches dramaturgas,
De aquellas estrellas negras que yacían en mis cielos
Cuanto desaparecías sin ellos.
Perdí el deseo de ver amaneceres,
Los ojos describen a mi corazón
Y mi alma late en confusión;
Se consume mi cuerpo sin tus cenizas,
Sin el calor que emitía tu amor, tus sonrisas.
Mis dulces palabras se preguntaban
En que instante te apagaste,
En qué momento volaron sin iluminarte
Con la esperanza. Te sentí, te vi,
Te añore y por tu viví;
Mi mirada busca la luz que se esfumo,
La bruma que me maldijo
Y en sus brazos la atrapó.
Las rosas de mi amor quieren ser sembradas
En el jardín de tus labios,
Ser regadas
Por el océano de tus mejillas
Bañadas en conmovedoras lágrimas.
Una ilusión se derrama empapando tu regazo,
Tus manos rotas filtran el dolor
Y se forman las cascadas de tus sueños
Que se lastiman al caer.
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