Amada mia

Finalizaba la tarde y con el crepúsculo
se dio lugar a una hermosa noche,
la cual cubria cada rincón con la oscuridad.
La luna se abrió paso entre las nubes,
asesinando el sol y adueñándose del cielo
que permanecería en tinieblas.
Una tenue luz en medio de la oscuridad,
iluminando un corazón que solo a la luna pertenece,
un corazón que late con su resplandor
y se alimenta de su inmaculado amor.

Tu eres la Luna que desgarro mi corazón y lo hizo eternamente suyo.

Te amo

domingo, 30 de agosto de 2009

Refujiate en mi velo


Refúgiate bajo el velo que nunca se ira.
El sol se apago y caerán esquirlas de fuego
Sobre las Alas  que lo enclaustraron,
Sobre las lágrimas que lo sofocaron.
Refúgiate bajo el velo que sin ti no volara.
El cielo se ha roto y caen sus trozos de hielo
Sobre el mar victima de su reflejo,
Sobre el barco que navega en su lamento.
Refúgiate bajo el velo que tu vida protegerá.
La oscuridad se abre paso hacia el horizonte
Cubriendo valles enteros con su sombra,
Asesinando el verde que con tinieblas devora.
Abrígate con el velo que de ti cuidara.
La luz camina lentamente por el sendero
Iluminándolo con suavidad, brilla
La penumbra que en caos delira.
Abrígate con el velo que a tu lado permanecerá.
El umbral es sepultado por las rosas
Que florecen en el jardín perdido
Regocijadamente por la lluvia al roció.
Abrígate con mi velo de tranquilidad,
Descansa en la paz que deseo brindarle
A tu corazón para sanarlo, Abrígate
Con el velo que eternamente te amara.

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