Amada mia

Finalizaba la tarde y con el crepúsculo
se dio lugar a una hermosa noche,
la cual cubria cada rincón con la oscuridad.
La luna se abrió paso entre las nubes,
asesinando el sol y adueñándose del cielo
que permanecería en tinieblas.
Una tenue luz en medio de la oscuridad,
iluminando un corazón que solo a la luna pertenece,
un corazón que late con su resplandor
y se alimenta de su inmaculado amor.

Tu eres la Luna que desgarro mi corazón y lo hizo eternamente suyo.

Te amo

domingo, 6 de septiembre de 2009

No mueras sin mi


El cielo cierra los destellos de luz,
desaparece de él su tranquilo Azul,
secuestra la calma con sus nubes grises
junto con tus lagrimas más tristes.

El océano destroza el feroz viento
con su incomparable fuerza y audaz reflejo;
halla el refugio de la tempestad
en el amor que te acompaña en eternidad.

Espérame pacientemente; observa el mar
atestado de las brumosas olas delirantes,
obsérvalo porque en él me podrás hallar
y en el velo de mi alma podrás descansar.

Inmoviliza tus pasos al borde del abismo,
siente la tormenta que acecha al precipicio;
sin que tus manos suelten las mías al caer
permanece a mi lado con seguridad amor mío.

0 comentarios: