Mi espera

Comienza a doler de nuevo,

mis pensamientos calumnian mi alma,

me destruyen asta sofocar mi cuerpo

como si viviera apuñalado por mis propias manos.

De nuevo soy juego de mis sentimientos,

la marioneta de un sufrimiento insensato

que esclaviza mis piernas y brazos,

limitando el camino donde cruzan mis pasos.

Tengo que perseguirte sin que te percates

del amor que entre hojas se esconde,

no deseo que falles por la ilusión

que como el sol entre nubes aguarda.

Necesito tomar tu mascara

si deseas que el amor no fluya

y quede enclaustrado en las cenizas

que soplaron los vientos de la felicidad.

En la distancia anhelo observar tu sonrisa

pero si esta es ausencia en tu rostro,

suplico porque tus lagrimas sean mías

y encadenarme en tu regazo para arrastrarme contigo.

Mi estancia es una noche eterna,

sé que la tuya es una tormenta que no cesa...

¿Es posible ver la luz si no estás cerca,

Si mi corazón enamorado continua su espera?

Prometí vivir por amarte,

pero sin tu voz se detienen mis latidos,

sin tu amor se pausan mis respiros;

el caminar duele si no estás conmigo.

Siento que le escribo versos al viento,

con miedo a que este se los lleve lejos

y me halle solitario mientras aguardo

por el elixir que me permita sonreír.