Amada mia

Finalizaba la tarde y con el crepúsculo
se dio lugar a una hermosa noche,
la cual cubria cada rincón con la oscuridad.
La luna se abrió paso entre las nubes,
asesinando el sol y adueñándose del cielo
que permanecería en tinieblas.
Una tenue luz en medio de la oscuridad,
iluminando un corazón que solo a la luna pertenece,
un corazón que late con su resplandor
y se alimenta de su inmaculado amor.

Tu eres la Luna que desgarro mi corazón y lo hizo eternamente suyo.

Te amo

domingo, 14 de febrero de 2010

Desmoronado


Mi corazón me consume por dentro,
con cada latido es mas desgarrador lo que siento.
¿A dónde se abra dirigido aquel amor eterno?
Mis suspiros se han perdido en el viento
con sus alas rotas por el lamento
que les suscita el no se tu quien los arrulle
de la tormenta que en mi ser está creciendo.

Mi alma se desborona
en los cristalinos granos de sal
que adornan mis lagrimas
surcadoras de los hermosos mares
donde tu sonrisa se solía reflejar.

¿En qué instante del tiempo
me descuide y extravié mis sueños?
Me he vaciado por dentro,
la esperanza muda quedo, ha muerto.

Fumo un cigarrillo,
se deteriora al igual que mi espíritu.
El humo que despide me recuerda
el amor pulverizado en ti,
un amor que gris se torno
para desvanecerse en el aire.
Quemo mis pulmones,
al igual que se quema mi vida,
una lenta e incesante agonía...
Sin ti así me siento, querida mía.

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