Zedka

El tiempo traza tu nombre con más fuerza

En mis pensamientos  que actúan como anhelos perdidos.

Cada amanecer eres el sol que me levanta

E ilumina el sendero que tengo por vivir;

Cada crepúsculo veo tus ojos reflejándose en el horizonte

Regalándome la esperanza para soportar la oscuridad venidera;

Y las noches se tornan hermosas al encender tu alma

En medio de esta penumbra que me devora.

Recuerdos me encierran en un pasado que desearía poseer

En este vacío e interminable presente,

Aquel pasado tan hermoso cuando yo respiraba en tu sonrisa.

El único mal que hemos cometido, nuestro reciproco error,

Fue que tan solo uno entregara su vida y corazón.

Añoraría que mi alma gozara de la inseguridad

De la que fantasmas me juzgan, sería una bendición

Porque mas hoy, para vivir, me engaño creyendo

Que aun existe un trozo de mi amor soñando en ti;

Es una esperanza que se duerme lentamente

Pero que sin ella moriría inevitablemente.

Más seguro de este amor, no logro estarlo,

Si aun en esta tormenta creo en palabras viejas,

Cuando me decías que me ibas a amar siempre.

Eres el cielo, la tierra y el infierno,

Eres mi pasado, pero mi gota de vida en el presente.

El polvo del tiempo es incapaz de abandonarte en el olvido

Porque las estrellas e incluso yo te necesito,

Te aferraste a lo más profundo en mí

Y jamás me resignare a sonreír junto a ti,

Apenas si lo logro tan solo en sueños finitos.

La más complaciente vida es la sima que nunca

Alcanzare mientras la silueta que dejaste

Sea lo único que hoy me apacigua.

Ni rogándole a mis ojos, logro que lloren tu partida,

Para destrozar tú recuerdo en mis lágrimas…

Los dos partimos a una vida que nos cambia

Al no lograrla cambiarla nosotros juntos.

Zedka, mujer escrita en el negativo de mi interior,

Jurar amor eterno dicen es una mentira para el espíritu,

Si estas almas viven en la verdad,

Me mentiré hasta que se canse mi corazón de latir.