Amada mia

Finalizaba la tarde y con el crepúsculo
se dio lugar a una hermosa noche,
la cual cubria cada rincón con la oscuridad.
La luna se abrió paso entre las nubes,
asesinando el sol y adueñándose del cielo
que permanecería en tinieblas.
Una tenue luz en medio de la oscuridad,
iluminando un corazón que solo a la luna pertenece,
un corazón que late con su resplandor
y se alimenta de su inmaculado amor.

Tu eres la Luna que desgarro mi corazón y lo hizo eternamente suyo.

Te amo

lunes, 15 de marzo de 2010

Noche De Ausencia I


Las estrellas me observaron,
el frio me refugio,
los cuerpos celestes me cautivaron
pero la luna de las nubes no surgió.

La noche me aprisiono
en su oscura y densa niebla,
me estremeció, de la luz me oculto
e hizo de mi una tiniebla.

Fueron tétricas las horas
y abran más suspiros inclementes,
porque tu ausencia es en mi vacio,
los solitarios pensamientos en mi mente.

¿De qué manera sobreviviré
si mis sueños en ti abandone?
¿Cómo palpitara mi corazón
si mi vida en ti la cobije?

Aguardare por tu amor,
incluso si me consumo por el dolor
que nace de las falsas esperanzas
inmortales en mi corazón.

Desearía que escucharas los versos de mi alma,
la melodía que por tu voz aclama,
sufro creyendo que el viento
no te entregara este pobre beso.

Mi sombra proclama a este ser marchito:
El fuego que se ha extinguido arderá en ella ,
pero la chispa encenderá de otro corazón.
Polvo eres en su pasado
y tan solo cenizas cubren su amor.


Tan solo fue una noche
y ya no sé como sobreviviré a las venideras.

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